GWIC juega un papel crucial en un consorcio que supervisa la rehabilitación integral de la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales de Infulene, estratégicamente ubicada cerca del barrio Jardim. Este proyecto es esencial para satisfacer las necesidades actuales y futuras de gestión de aguas residuales. La rehabilitación se centra en la supervisión meticulosa de la construcción, la gestión de costos y tiempo, el control de calidad, la responsabilidad ambiental y social, la seguridad y la logística eficiente del sitio. Con la planta mejorada ahora capaz de procesar aguas residuales para hasta 128,000 habitantes y manejar 1,340 m³/día de lodo fecal, representa un avance significativo en la infraestructura urbana. Financiado por el Banco Mundial, este proyecto muestra nuestro compromiso con el desarrollo urbano sostenible.